Para poder transmitir correctamente tus mensajes en cualquier medio de comunicación o canal en el que tengas tu marca, es de suma importancia que todo texto sea revisado antes de publicarlo.
Aquí te compartimos algunos de los errores ortográficos más comunes en la redacción de textos:
- Hubieron. Lo correcto es hubo. En este aspecto el verbo haber está impersonal. Ejemplo: Hubo muchos casos…
- Sobretodo y no sobre todo. Lo correcto es sobre todo, separado pues sobretodo es una prenda de vestir. Sobre todo significa que, de todo, es lo más importante.
- Que, como, cuando, donde, sin acento. Este es un ejemplo muy común a la hora de redactar textos. Son palabras tónicas que, cuando se trata de hacer referencia a una pregunta o exclamación, sobre algo llevan tilde:
- ¡Qué hiciste!, ¿Cómo te fue ayer?, ¿Cuándo llegaron? o ¿Dónde estuviste todo el día?
- El / él o tu / tú. Cuando se refiere a un pronombre él o tú se acentúan. Cuando se trata de posesivos no se acentúan. Por ejemplo: Él es mi competencia directa. Tú eres el responsable de verificarlo.
- Si no y sino. Muchas veces suelen escribir “si no” cuando hablan de una variante en vez de “sino”. La diferencia es simple: “si no” separado es una conjunción condicional. Por ejemplo: Si no estudias, reprobarás. Y, “sino” junto, es un sustantivo que da una variante al enunciado. Está ligado a tu primera oración dando una segunda posibilidad.
Ahora que sabes estos pequeños errores, recuerda que como escribes te perciben.
Antes de publicar un texto en redes sociales, blogs, publicidad, entre otros, es necesario revisar los textos finales. De ser posible, pide apoyo a alguien más para que pueda ver con otros ojos el texto e identificar si hay algún error ortográfico.
Un consejo que te compartimos es que, al terminar de escribir, leas de final a principio el texto, para que tu mente pueda identificar más fácilmente cada palabra por separado y no en conjunto como leemos normalmente.
No te preocupes, a todos nos ha pasado. Es cuestión de práctica y atención a los detalles.
Te recordamos que leer, mejora la ortografía significativamente. También puedes intentar tener un diario para que te vayas soltando y encuentres tu propio estilo.